Desde los grandes clásicos dirigidos a nuestros vecinos a los más actuales “vamos, vamos Oviedo” o “ésta es la hinchada loca del Real Oviedo” un cántico y una animación constante son y deben ser parte complementaria y necesaria a un partido de fútbol, a una afición, a un deporte, a una entidad y, en definitiva, a una pasión.
Symmachiarii es para nuestro Real Oviedo, sin posibilidad de duda alguna, su grupo de animación y su grupo supporter más fiel e incondicional (prueba fácil de ello es la célebre frase “no baja/sube ni Symmachiarii” cuando rara vez, y generalmente por motivos ajenos, la afición azul no acompaña en un desplazamiento al equipo).
Y es que, tras 20 años al pie del cañon, tras haber pisado y sentido el barro junto al equipo, tras “20 años de pilares inquebrantables” Symmachiarii sigue siendo el referente principal de animación para el Oviedismo y, todo ello, haciéndolo de un modo distinto al de la deteriorada imagen mostrada por ciertos grupos ultras de otros equipos, haciéndolo con respeto y siempre fieles a sus valores iniciales: oviedismo, apoliticismo y antiesportinguismo.
Desde la distancia, Symmachiarii se concibe con orgullo, con necesidad y con cariño…
Desde fuera, se contempla por muchos con envidia y con ganas de asemejarse…
Y, desde casa, como el aliento necesario para aupar al equipo, para levantar la voz de toda la afición y para llevar al Real Oviedo a unos renovados 20 años más de éxitos futuros.
¡Gracias Symmachiarii! y ¡Hala Oviedo!
Deja una respuesta